SONRISAS DE LUZ Y PAZ

EVANGELIO DEL DÍA. MIS ESCRITOS, MÚSICA Y POESIAS

lunes, 8 de noviembre de 2021

NUESTRA SEÑORA DE LA ALMUDENA, Patrona de la archidiócesis de Madrid -Solemnidad-

 





NUESTRA


 SEÑORA


 DE LA


 ALMUDENA,


Patrona de la


 archidiócesis


 de Madrid


-Solemnidad-

PRIMERA LECTURA


Vi que manaba agua del lado derecho del templo, y habrá vida dondequiera que llegue la corriente
Lectura de la profecía de Zacarías 2,14-17


Alégrate y goza, hija de Sión, que yo vengo a habitar dentro de ti -oráculo del Señor-.
Aquel día se unirán al Señor muchos pueblos, y serán Pueblo mío.
Habitaré en medio de ti, y comprenderás que el Señor de los ejércitos me ha enviado a ti.
El Señor tomará posesión de Judá sobre la tierra santa y elegirá de nuevo a Jerusalén.
Calle toda carne ante el Señor, cuando se levanta en su santa morada.
Palabra de Dios.

 

Salmo responsorial: Jdt 13,18bcde.19

R. Tú eres el orgullo de nuestra raza.

El Altísimo te ha bendecido, hija,
más que a todas las mujeres de la tierra.
Bendito el Señor, creador del cielo y tierra.R.

Que hoy ha glorificado tu nombre de tal modo,
que tu alabanza estará siempre
en la boca de todos los que se acuerden
de esta obra poderosa de Dios.R.

SEGUNDA LECTURA


Vi la nueva Jerusalén, arreglada como una novia que se adorna
para su esposo

Lectura del libro del Apocalipsis 21, 3-5a

Escuché una voz potente que decía desde el trono:
-«Ésta es la morada de Dios con los hombres: acampará entre ellos.
Ellos sereán su pueblo, y Dios estará con ellos y será su Dios. Enjugará las lágrimas de sus ojos. Ya no habrá muerte, ni luto, ni llanto, ni dolor. Porque el primer mundo ha pasado.»
Y el que estaba sentado en el trono dijo…
-«Todo lo hago nuevo.»

Palabra de Dios.



EVANGELIO
Ahí tienes a tu hijo. Ahí tienes a tu madre




Lectura del santo evangelio según san Juan 19, 25-27

En aquel tiempo, junto a la cruz de Jesús estaban su madre, la hermana de su madre, María, la de Cleofás, y María, la Magdalena.
Jesús, al ver a su madre y cerca al discípulo que tanto quería, dijo a su madre:
-«Mujer, ahí tienes a tu hijoj.»
Luego, dijo al discípulo:
-«Ahí tienes a tu madre.»
Y desde aquella hora, el discípulo la recibió en su casa.

Palabra del Señor.